Enciclopedia de Mujeres "Oliva Sabuco"

Guillermina Medrano Aranda

Guillermina Medrano Aranda

Maestra. Primera concejala del Ayuntamiento de Valencia.
[Albacete, 1913 - Valencia, 2005]
 
Nació en una familia de tradición republicana y socialista. Estudió Magisterio y Filosofía y Letras, ejerciendo como maestra en LLíria. En 1936 consiguió su acta en el Ayuntamiento de Valencia, convirtiéndose en la primera concejala del consistorio de toda su historia. Durante la Guerra Civil destacó en su labor de protección de la infancia. En 1938 se exilió a París, después a Santo Domingo donde trabajó para el Ministerio de Educación y finalmente a EEUU. Allí, desarrolló una intensa actividad docente, siendo distinguida en 1965 por la Universidad de Harvard.
 
*Retrato procedente de la Universitat de Valencia.

ISABEL DE LA CRUZ

ISABEL DE LA CRUZ

(Guadalajara, primera mitad del XVI – segunda mitad XVI)
Beata y fundadora del movimiento alumbrado en Castilla.
 
Perteneciente a una familia de origen converso y con una hermana monja, muy pronto sintió una profunda inquietud espiritual que le llevó a abandonar muy joven su hogar, abrir un pequeño taller de costura y convertirse en beata sujeta a la regla franciscana. A pesar de su modesto oficio leyó intensivamente la Biblia y algunas obras de Erasmo, entrando en contacto con las ideas de “recogimiento” defendido por los franciscanos.
 
A partir de ahí, comenzó a defender lo que se conoció como el “dejamiento”, es decir, el abandono absoluto a la voluntad de Dios, un estado en el que el pecado era imposible y, por tanto, no tenían sentido ayunos, disciplinas y otras formas de penitencia[1]. También eran innecesarias las formas externas de devoción ya que lo que defendía era una comunicación directa y personal con Dios, rechazando las visiones y arrobamientos tan propios entre los recogidos franciscanos. Isabel de a Cruz defendió estas ideas con pasión y parece que  comenzó a escribir un libro titulado Doctrinas nuevas que se perdió sin que fuera impreso. Además, logró rodearse de clérigos y ganar influencia sobre erasmistas vinculados con la Universidad de Alcalá de Henares. En Guadalajara, el grupo de alumbrados que ella lideraba contó con el apoyo de un buen número de personas de buena posición de origen converso y gozó de la protección de mujeres de la familia Mendoza, extendiéndose sus ideas por otras localidades como Toledo, Escalona, Cifuentes o Pastrana[2].
 
En 1519, Mari Núñez, amiga de Isabel de la Cruz y miembro del grupo alumbrado de Guadalajara, acusó a la beata y a su más directo colaborador, el sacerdote Pedro Ruiz de Alcaraz, y a otras mujeres del grupo como María Cazalla, de negar la existencia del infierno, ridiculizar la penitencia y renegar de las buenas obras, algo que les aproximaba a las ideas heréticas de Lutero. En 1523 la Inquisición abrió proceso contra ellos y el provincial de la orden franciscana exigió a Isabel de la Cruz que dejase de recibir visitas de profesores y alumnos de la Universidad de Alcalá, así como de clérigos y personas de distinta posición social. Al negarse fue despojada de su estatus como hermana terciaria y fue arrestada bajo la acusación de herejía.[3] Juzgada en 1529, todos sus bienes quedaron confiscados y fue condenada a ser sometida a vergüenza pública paseando por la ciudad con un sambenito y después a sufrir prisión perpetua. Sabemos que esa pena le fue conmutada en 1538 por penitencias, romerías y oraciones y la prohibición de salir de Guadalajara y sus arrabales sin licencia, y que en 1540 se vendieron los bienes que le había confiscado la Inquisición. A partir de esa fecha desaparece cualquier referencia a ella, hasta el punto de no poderse determinar la fecha de su muerte.
 
Autoría: Francisco Arriero
* No se han encontrado retratos de Isabel de la Cruz.  
Fachada Palacio del Infantado por su vinculación de las mujeres de la familia Mendoza.
 
 

[1] Antonio Fernández Luzón, “Isabel de la Cruz”, Diccionario Biográfico electrónico de la Real Academia de la Historia, http://dbe.rah.es/biografias/17946/isabel-de-la-cruz

[2] De hecho algunos autores como Antonio Pau sitúan a Isabel de la Cruz en Toledo en algún momento de su vida. Antonio Pau, Herejes, Madrid: Trotta, 2020, pp. 69-71.

[3] Laura Canabal Rodríguez, “Heterodoxia en el reinado del Emperador: Toledo, los alumbrados e Isabel de la Cruz”, en Carlos V y la quiebra del humanismo político en Europa (1530-1558), José Martínez Millán (coord.), Madrid: Sociedad Estatal para la Conmemoración de los Centenarios de Felipe II y Carlos V, 2001, pp. 309-332.

 

Isabel de Portugal

Isabel de Portugal

Emperatriz y Señora de Albacete, Alcaraz , San Clemente y Villanueva de la Jara [Lisboa, 1503-Toledo,1539]
Hablaba varias lenguas, también el latín, tras una excelsa formación musical científica y religiosa como la recibida por su madre en la Corte humanista de los Reyes Católicos. Fue Señora de Alcaraz y Albacete desde su matrimonio con Carlos V, hecho que le supuso una importante renta vitalicia. Sin embargo, el gran ejercicio del poder le llegó al tener que gobernar el país tras las largas ausencias del Emperador,
granjeándose el favor del pueblo. Terminó asentada en Toledo, rodeada de una pequeña corte de intelectuales como Garcilaso de la Vega.
*Retrato realizado por Tiziano en 1548, propiedad del Museo del Prado en Madrid 
 
 

Isabel González-Alegre Fanjul

Isabel González-Alegre Fanjul

Empresaria de las telecomunicaciones.
[Toledo, 1867- Aranjuez, 1937]
 
Aunque sus orígenes familiares proceden de Asturias, nuestra ilustre paisana nació en Toledo y contribuyó de manera decisiva al progreso de la ciudad en el siglo XIX al implantar el teléfono en la actual capital de Castilla-La Mancha en 1890. Era una mujer muy culta que hablaba francés y leía con voracidad cualquier tipo de libros. Se casó con el juez progresista Rafael Corcuera y fundó junto a él la primera concesionaria de servicio telefónico de Toledo, figurando esta a nombre suyo, algo inusual en aquellos años. Sin duda, fue una de las grandes pioneras del mundo empresarial de su época.
 
*Retrato correspondiente al portal Fábrica de la Memoria.

Isabel María Parreño de Arce y Valdés

Isabel María Parreño de Arce y Valdés

Marquesa de Llano. Mecenas y embajadora en Viena.
[La Roda, 1759 - Albacete, 1848]
Fue una adelantada a su tiempo que llevó muy a gala ser de origen manchego en sus diversas estancias en el extranjero. Desde su paso por Parma sintió una gran inquietud por las artes, convirtiéndose en mecenas de distintas personalidades en el campo de la música, la escritura y la pintura de la época. Prueba de esta última pasión es el encargo de su retrato al gran pintor de Bohemia, Anton Raphael Mengs. En Viena también cultivó su intensa labor de mecenazgo amadrinando al compositor español Martín y Soler que alcanzó un reconocido prestigio internacional.
  
*Retrato de Anton Rafael Mengs realizado en 1775, propiedad del Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.

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